16.11.07

Delicadezas de mis desvelos

Delicadezas de mis desvelos


Tu ausencia, no física, sino inmaterial, no deja de ser un enigma… Mis intenciones susurraron en mi oído otra vez, rogándome que disimulase… En el momento en que quise inquirir la razón de ese misterio, cometí el primer error, procediendo a obrar en detrimento de mi audacia…
Tu presencia vino a perturbar (desafortunadamente¿?) las leyes de equilibrio que forzosamente se había impuesto mi personaje…Cuan distinto sería el camino si uno nunca se permitiese tropezar…
La exagerada cortesía, la innumerable cantidad de rasgos cautivadores, y sobre todo las ansias de llevar a cabo pretensiones tildadas de antemano como inconvenientes, me convencieron de hacerte partícipe de mis atrevimientos y desenfrenos…
Inesperada e inevitablemente…mis sentidos se nublan, mi razón me abandona, si existo es solamente por la percepción de mis placeres… No obstante, he recibido el golpe que ha de quebrantar mi vida, y afortunadamente todas las facultades que la componen no se han desvanecido aún…
Ignoro si es demasiado tarde para huir del deslumbramiento causante de dicha turbación y recuperar, inclusive aunque carezca de sentido, las equívocamente sobreestimadas, estabilidad y cordura… que no hacen más q mantenerme en un aparente estado de armonía y prudencia, que no vacila en desmoronarse ante el más mínimo estímulo…
Sencillamente, no sé que es, pero cedo ante ello, que quizás de un modo no necesariamente ingenuo, acrecienta mis inquietudes y me lleva a caer en mis propias trampas, haciendo caso omiso de mis racionales argumentos…
Mientras permanezca, coleccionaré todo lo que mi esencia necesite para existir durante siglos... Hasta ahora, el desconcierto indudablemente se ha apoderado de mis ingenios, poniendo de manifiesto obsesiones, manías, caprichos, quimeras y desbarajustes…
Mi presunción, por más infundada que se considere, no procura desembocar en la compasión, sino modestamente complacer, y evitar el temor de desencadenar los acontecimientos que la motivan…
Acabas de oír la más halagadora confesión que te es posible escuchar… En vano intentarías aplacarla con trivial indiferencia… no creo que pudieses tomar una decisión más impertinente que esa… solo te encaminaría a distar considerablemente de ser sujeto merecedor de lo que se te ofrece…

SOPHIE

No hay comentarios.: